Para estar bien emocionalmente, todos necesitamos un lugar seguro – tanto física como emocionalmente – para volver después de un día pesado. Y no solo nosotros, los niños también están abrumados con los problemas y demandas diarias que corresponden a crecer. Necesitan un hogar seguro, sólido, donde se sientan protegidos. Necesitan sentir que podemos mantenerlos a salvo.

Descubre en ésta guía gratuita cómo convertir tu hogar en un refugio en 7 pasos.

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