En el mundo actual simplemente ya no es posible tomar decisiones de negocio sin antes respaldarlas con información que veráz que nos permita escoger la mejor opción. Es aquí donde entra una nueva práctica que llega para facilitar esto a los comercios dedicados al retail.
La Inteligencia Retail se refiere a la tecnología usada para obtener información sobre el usuario y cómo interactúa en los comercios. Algunos ejemplos de esto serán los aparadores inteligentes, señalizaciones digitales, cámaras y cualquier otra herramienta que nos permita la recolección de datos sobre la actividad del consumidor.
Similar a lo que las herramientas digitales nos proveen en las plataformas online, el principal beneficio de la Inteligencia Retail es darnos un mapa de la actividad del consumidor para entender su comportamiento de compra, para entonces idear estrategias que nos permitan generar ventas de forma más efectiva.
¿Cómo funciona?
Las dos principales bases tecnológicas que podemos encontrar para que la Inteligencia Retail sea realidad son la Inteligencia Artificial y el Deep Learning (aprendizaje profundo). Ambas herramientas trabajando en conjunto permiten un continuo flujo de información que se alimenta constantemente arrojando nuevos datos y con ellos, aprender de forma continua para automatizar procesos de interacción con las personas que logren volverse más rápidos y efectivos, generando una mejor y más óptima experiencia para los consumidores.
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